viernes, 13 de enero de 2012

Al sur de Puerto Montt


Corrimos juntos muchas veces, pero no sabíamos que corríamos, ni podíamos vernos entre tanto pánico. Muchas veces caminábamos al mismo ritmo, y con el mismo pie, escuchando la misma canción en nuestros audífonos; todo al mismo tiempo, pero no lo supimos. De hecho, aún no lo sabemos, pero es divertido tratar de adivinar cosas que aún no suceden, para después reírse de las situaciones en el futuro. Y de todas las coincidencias que tuvieron que ocurrir para encontrarnos en un punto preciso... y ahí ya no puedo seguir adivinando mucho más.

En el futuro podré contar que todo empezó a muchos kilómetros de Santiago, por allá más al sur de Puerto Montt, un lugar al que probablemente nunca has ido. Tú aún no lo sabes, pero ahí comenzó todo. Yo aún no estoy segura de si alguna vez podré contar esa historia, quizás la oportunidad desaparezca, pero no quiero perderla, porque es una manera un poco intrigante de empezar a contar la historia. Sobre todo si ni tú ni yo estábamos presentes cuando sucedió.

Y el día que lo sepas, te reirás. Y dirás que no tiene ningún sentido que diga esto ahora, cuando no hay nada, pero es como aquél día al sur de Puerto Montt, donde tampoco había nada aún. Es que tengo fijaciones con pensar en cosas que probablemente nunca sucederán, y no sé por qué precisamente con ciertas personas. Pero después de analizarlo por varias semanas dije "Si, en algún punto algo... algo..." Olvídalo, no sé explicarlo. No tiene sentido, mejor me quedo callada.

No hay comentarios:

Marisopas

Followers